domingo, 13 de marzo de 2011

La espera

Los vagones del tren vienen vacíos,
como el alma desolada de una viuda joven
El polvo se levanta unos centímetros del suelo
mientras las oxidadas ruedas avanzan por los carriles.
El sol adormece mis ojos, que un poco perdidos
tratan de mirar el final de las vías.
Hay dos perros a mi alrededor, uno me mira con la esperanza de que
mi mano toque su cabeza y el otro simplemente orina mi zapato.
Las astillas de la banca vieja me punzan la columna pero aún estoy esperando tu tren
Tengo la boca seca y un sabor amargo mezcla de cigarro y desilusión.
Mientras pasan las horas, mi ansiedad no deja de mascar mis uñas.
Justo con un golpe de viento al final de las vías
puedo apreciar el resplandor del acero brilloso de la máquina que te acerca a mí.
Mis pupilas expectantes brillan como faros en la noche, cuando las puertas por fin se abren,
entonces tengo de frente tu rostro y eso hace que todo valga la pena.

jueves, 10 de marzo de 2011

viernes once


De los mantos oscuros que adormecen mi cerebro
tú eres la luz que sostiene al débil
las estrellas que acompañan al caminante de noche
el sol que termina el trabajo del pescador
de los vientos raros que hacen al alma enloquecer
tu eres la cordura que me ancla a siempre volver
yo no puedo pensar en dos como número entero
pero contigo arrojo el orgullo y aveces siento miedo
las arenas que atrapan mis pasos, dudan las huellas
cuando camino hacia ti
serán las noches enteras y mis días más claros
que al mirar tus ojos no encuentro otro faro
que descaro... de creer lo de siempre y sorprender
mi espíritu ingenuo, cada vez que tu boca adormece mis llantos
no soy un entero para poder sumarte, soy los pedazos de nada
pero contigo puedo formar lo que tú quieras.